viernes, 23 de diciembre de 2016

Oud Beersel Bersalis Tripel

MARCA: Oud Beersel
MODELO: Oud Beersel Bersalis Tripel
ESTILO: Tripel (9'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Bélgica

CARACTERÍSTICAS: En el 2005 Oud Beersel puso en marcha la marca Bersalis, producida en la cervecera Huyghe, con dos referencias, Kadet y Tripel. La primera es posiblemente la más original porque pretende ser una Tripel con baja graduación alcohólica (no me acaba de quedar claro entonces cuál va a ser la diferencia con cualquier Blonde belga), mientras que la que voy a comentar hoy tiene 9'5º de alcohol y entra por lo tanto dentro de lo esperable para este estilo. La compré por cierto en Be Hoppy, tienda de cerveza junto al Caixa Forum de Madrid que se ha convertido en uno de mis lugares favoritos para comprar alguna botella durante los viajes que tengo que hacer a la capital.

Es de un color dorado ambarino brillante, como el de una Lager en condiciones, con una turbidez mínima. Al destaparle se escapa la espuma de la botella lentamente, y una vez servida ocupa todo el volumen de la copa. Es compacta, resistente, con un aspecto cremoso, alimentada por gran cantidad de burbujas que suben con rapidez. En nariz es tan exuberante como visualmente, rebosa manzana golden, pera, banana y algo más suave albaricoque sobre una base de malta, caramelo, suave bizcocho y recuerdos de miel. Completa el conjunto un punto de cítricos, clavo y levadura belga... y respecto al alcohol, es evidente pero no está descontrolado gracias a la ayuda del azúcar, que lo disimula. La verdad es que impresiona lo bien que se integran todos los aromas pese a su potencia.

El nivel se mantiene en boca, la fruta se presenta como un torrente con manzana, banana, membrillo dulce y más suave pera, que se funden con malta sin tostar, toffee, notas de miel que progresivamente ganan fuerza y alguna chispa de azúcar candy. De fondo quedan grano y masa de pan, controlando parcialmente el dulzor. El final está equilibrado con maestría, tiene un amargor firme cargado de lúpulo noble, cítrico y floral, un punto de especia picante, sobretodo clavo y pimienta, fruta, levadura y el alcohol, que ni se esconde ni destaca. Es una Tripel compleja, y a pesar de sus casi 10º, muy bien disimulados, se bebe con facilidad y no satura. Para repetir, a la altura de sus Lambic.

NOTA:

lunes, 19 de diciembre de 2016

Shepherd Neame 1698

MARCA: Shepherd Neame
MODELO: Shepherd Neame 1698
ESTILO: Strong Ale (6'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Inglaterra

CARACTERÍSTICAS: Con esta entrada vuelvo a dar protagonismo a un clásico entre los clásicos de la Real Ale británica, Shepherd Neame, con una de sus elaboraciones más recientes que sin embargo se ha establecido con firmeza dentro de su repertorio: 1698, antes conocida como Celebration Ale. Esta cerveza se empezó a producir en 1998 para conmemorar el 300 aniversario de la fábrica, y se trata de una Strong Ale algo más lupulada de la cuenta (dentro de los estándares británicos), que ha cosechado diversos premios internacionales.

Es de un bonito color bronce rojizo, con una espuma blanca y cremosa no muy abundante que se adhiere con firmeza al vidrio. Si a esto se le suma una carbonatación discreta y un poco perezosa, la verdad es que ni Ricky Gervais es tan británico. Su perfume es relajado, con gran cantidad de dulce malta tostada y caramelo, suave galleta, bizcocho, mantequilla y algún deje de vainilla. Como soporte queda la fruta fruta, principalmente manzana y ciruela, aunque también se detecta algo de naranja madura del lúpulo, que además aporta notas florales muy aromáticas. 

En boca es algo más directa, aunque la calidad no baja ni un milímetro. Inicio de malta tostada, caramelo y vainilla en compañía de frutas, inicialmente algo más cítricas pero a medida que avanza ganan protagonismo registros más dulces. Textura sedosa y cuerpo consistente, se suman al final del trago recuerdos de frutos secos que le aportan sobriedad. Final de amargor firme, herbal, terroso, bastante cítrico y con un leve punto medicinal, deja una agradable sequedad en boca. Es un ejemplo perfecto de lo que es una Ale británica, redonda, equilibrada y sabrosa. Está claro que en Shepherd Neame no necesitan hacer extravagancias.

NOTA:

jueves, 8 de diciembre de 2016

Cornet

MARCA: Cornet
MODELO: Cornet
ESTILO: Ale Dorada Fuerte con roble (8'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Bélgica

CARACTERÍSTICAS: La cervecería De Hoorn, parte del grupo Palm NV, fue fundada en 1686 en una mansión con el mismo nombre localizada en Steenhuffel-Londerzeel, en el Brabante flamenco. Únicamente tienen ahora dos cervezas en su catálogo, Cornet y Arthur's Legacy, y ambas rinden homenaje a dos personajes que han tenido una gran relevancia en la historia de la fábrica, su fundador Theodoor Cornet y Arthur Van Roy, quien se encargó de mantenerla viva a partir de principios del Siglo XX. Cornet, recomendada por el dueño de La Maison Belge de Madrid, es una ale dorada fuerte a la que se han añadido chips de roble, intentando emular la esencia de la cerveza de guarda madurada en barrica que preparaba Theodoor Cornet en las bodegas del castillo Diepensteyn.

Es una cerveza dorada cristalina, con una espuma blanca jabonosa alimentada por burbujas gruesas que suben una a una hasta la superficie. El aroma tiene una intensidad moderada y no es difícil pasarlo por alto. La malta es fundamental, acompañada de recuerdos de galleta, mantequilla y algo de cereal crudo, que se alternan con marcadas notas de pera y manzana. De fondo cítricos, un toque de manzana verde, lúpulo noble, un punto de alcohol y algo de levadura belga, mientras que la esperada barrica no hace al final acto de presencia, quizá eclipsada por los demás matices.

La entrada en boca presenta un dulzor intermedio, de nuevo con malta, cereal crudo y galleta, sobre una base potente de fruta, principalmente manzana golden y plátano. También es evidente el azúcar candy, e incluso en mi opinión algo descontrolado Pronto salen los cítricos, mucha especia picante, levadura belga y quizá alguna nota de madera, para terminar en un final demasiado amargo y seco, con un potente soplo de alcohol que no resulta nada cálido ni reconfortante, lúpulo herbal afilado y notas de pimiento verde, persistiendo estos tres en el largo regusto. La carbonatación, excesiva para mi gusto, refuerza los sabores más ácidos y ásperos, quedando una cerveza poco equilibrada y que se hace un poco cuesta arriba. La similitud con algunos vinos blancos es evidente, pero no tiene la untuosidad e integración de esta bebida.


NOTA:

viernes, 2 de diciembre de 2016

Jopen Jacobus RPA

MARCA: Jopen
MODELO: Jopen Jacobus RPA
ESTILO: American Pale Ale con centeno (5'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Países Bajos

CARACTERÍSTICAS: Harleem es una ciudad de alrededor de 150.000 habitantes situada en la costa oeste de los Países Bajos. Antiguamente conocida por albergar un gran número de fábricas de cerveza, que destacaban además en la producción de Koyt, un estilo de cerveza medieval que emplea en su elaboración diversos cereales y una mezcla de hierbas denominada "gruit" que sustituye al lúpulo. La última de sus fábricas, Het Scheepje, tuvo que cerrar en 1916 por la baja demanda de sus productos provocada por la popularidad de las cervezas lager, y no fue hasta la década de los 90 cuando se volvió a elaborar cerveza en Harleem. Para ello se tuvo que recurrir a dos recetas antiguas encontradas en los archivos municipales de la ciudad, una de 1407 y otra de 1501 que, tras ser verificada su autenticidad por el arqueólogo Maarten Poldermans y el historiador Loes Vroom, dieron origen a Koyt y Hoppen respectivamente. Estos hechos favorecieron la fundación en 1996 de la cervecera Jopen, quienes incluyeron entre sus referencias estas dos elaboraciones, además de muchas otras.

La cerveza que voy a comentar hoy es su APA con centeno, un cereal que siempre que aparece en mi vaso me trae grandes alegrías. Es de color pardo, bastante turbia, con un aspecto inmejorable gracias a una espuma muy densa y cremosa, en cantidad abundante y con una retención tremenda. La entrada en nariz espectacular, con un puñetazo de resina y hierba aportado por el lúpulo americano, dejando una deliciosa estela de maracuyá y mango, mientras queda un contundente fondo de malta tostada, caramelo y toffee. Completan un punto de clavo, recuerdos de cáscara de limón y algo de pomelo, consiguiendo un conjunto exquisito.

De cuerpo medio-alto, sobretodo para el estilo, es evidente la calidez y sedosidad del centeno. El sabor lo domina la dulce malta, densa y potente, y a medida que avanza el trago sale el lúpulo, con un carácter más tropical en el que el mango es el protagonista, mientras que el pino es algo más discreto. Final de amargor moderado, con fruta, algo de cítricos, y es en el regusto final cuando se seca, aparece la astringencia, se refuerzan limón y pomelo y aparece especia picante y hierba. Es una cerveza compleja y muy bien equilibrada, generosa con el lúpulo pero sin dejar de lado la malta, lo que yo creo que es fundamental para cualquier elaboración. Era la primera vez que probaba nada de Jopen y me he quedado muy impresionado con el nivel, posiblemente se encuentre entre las mejores APA que he tomado este año.

NOTA:

miércoles, 23 de noviembre de 2016

Thurn und Taxis Roggen

MARCA: Thurn und Taxis
MODELO: Thurn und Taxis Roggen
ESTILO: Roggenbier (5'3% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: Thurn und Taxis es el nombre de una de las mayores familias de la aristocracia alemana, cuyos orígenes se remontan al menos al siglo XVI. Además de por su gran fortuna, es conocida por haber adquirido durante el siglo XIX un gran número de cerveceras, para acabar finalmente centralizando la producción en la fábrica de Regensburg, localidad del centro de Baviera donde reside la familia. En el año 1966 la cervecera fue vendida al grupo Paulaner, actual propietario, habiéndose decidido mantener el nombre a la marca hasta nuestros días.

El modelo que he conseguido de esta marca es sin duda el más especial puesto que se trata de una Roggenbier, un estilo tradicional poco habitual que modifica las clásicas cervezas de trigo sustituyendo parte del cereal por centeno. Cubierta por una fina capa de espuma beige grisácea, su color es marrón, aunque se vuelve pardo al mirarla al trasluz. El aroma es de dulzor moderado, cargado de grano tostado, nueces, almendras, malta, suave caramelo y cacao. Está envuelto por frutas maduras, al principio más ciruela aunque después va sustituyendo el plátano, también algún deje de pasas y moras, acompañadas por un marcado toque de clavo, canela y suave levadura. En cuanto al lúpulo, sin ser lo fundamental, también está presente en forma de hierba y cítricos.

Nada más tocar la boca el sabor estalla, salen grandes cantidades de malta tostada, mucho cereal oscuro, pan negro, frutos secos y restos de cacao, mientras que la fruta queda en un segundo plano, siendo de nuevo lo más destacable plátano y un punto de frutas del bosque. El final es muy característico: se seca, aparece un amargor contundente, ligeramente ácido y ahumado, y desprende recuerdos cítricos, especiados y levemente herbales. Su textura cremosa compensa con creces la liviandad del cuerpo y al final queda una cerveza muy bien equilibrada, permitiendo acabarse sin problemas los 50 cl a pesar de que el sabor es peculiar. Yo repetiré encantado, pero reconozco que su originalidad puede echar para atrás a alguno. 

NOTA:

domingo, 20 de noviembre de 2016

Moritz Epidor

MARCA: Moritz
MODELO: Moritz Epidor
ESTILO: Märzen (7'2% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: España

CARACTERÍSTICAS: La fábrica de cervezas Moritz fue fundada en Barcelona en 1856 por el francés Louis Moritz Trautman, y estuvo elaborando cervezas en esta ciudad hasta 1978, cuando la delicada situación económica les obligó a echar el cierre. En el año 2004 la familia Moritz relanzó la marca, aunque la elaboración se lleva a cabo en Cervezas La Zaragozana, y en el 2011 completó la rehabilitación de la fábrica original en la Ronda de San Antonio, que ahora mismo funciona como un brewpub. Han pasado ya 6 años desde que hice referencia a su primera elaboración de esta nueva etapa, mientras que hoy voy a dedicar un artículo a su Märzen.

De color naranja rojizo, cristalina, exhibe reflejos bronceados con la luz. Genera una espuma beige grisácea, abundante y compacta al inicio, pero que se reduce bastante en pocos minutos. El aroma está provisto de cereal, dulce malta tostada, algo de caramelo y fruta, principalmente manzana asada, mientras que de base queda la miel, con quizá algún mínimo resquicio de verdura hervida y un mínimo deje alcohólico. El lúpulo es sutil, y aporta un toque de limón dulce que da frescor al conjunto.

El sabor es inicialmente muy maltoso y almibarado, incluso en algún momento llega a parecer algo artificial, con dulce grano tostado, azúcar moreno, manzana asada, suave sirope de caramelo y algún deje de té árabe. La gasificación impide que el trago se hunda, pero tampoco es capaz de levantarlo, quedando una cerveza un poco más pesada de la cuenta. Final de amargor leve, con notas cítricas, leve especia picante y una medida calidez alcohólica. No me ha parecido una cerveza catastrófica pero sí mejorable, mi impresión es que el exceso de dulce la hace demasiado plana y uno acaba perdiendo el interés. Se queda lejos de Export de Ambar, al menos en mi opinión,

NOTA:

domingo, 13 de noviembre de 2016

Cata "Mèter Bier" en La Vinoteca: Imperial


"De lo sublime a lo ridículo no hay más que un paso". Citando a Napoleón con esta frase cargada de intención me invitó Rubén a la última sesión del año del ciclo de catas Mèter Bier de La Vinoteca, centrado en las cervezas que llevan el prefijo Imperial (y que cada vez que alguien emplea fuera del término Imperial Stout algo dentro de mí muere). Nuevamente el encargado de dirigir esta cata iba a ser Rodrigo Valdezate, del Jardín del Lúpulo, quien tuvo que pasar por mil peripecias y casi las mismas horas de coche para plantarse en Pamplona a la hora prevista.

Las cervezas previstas para la noche eran ciertamente impactantes, tanto por los estilos que emulaban como por las fábricas que estaban detrás de ellas. Probamos:
  • Amager / Three Floyds Swole Mole (Dinamarca, 7% ABV)
  • Black Market Ashcroft (Estados Unidos, 9'8% ABV)
  • Sixpoint Puff (Estados Unidos, 9'8% ABV)
  • Nómada / To Øl Battle Royal Imperial Miso Porter (España, 11%)
  • Nøgne Ø / A Imperial Koji Saison (Noruega, 14% ABV)
  • De Molen Rasputin (Países Bajos, 10'4% ABV)
  • To Øl Blossom Director's Cut (Dinamarca, 13'5% ABV)
Como podéis ver la sesión fue potente y, entre las protagonistas de la noche, fueron las elaboraciones de Black Market, Sixpoint, Nómada con To Øl y De Molen las que me pareció que destacaban por su altísimo nivel. La Saison con arroz koji y levadura de sake de Nøgne Ø y A me resultó muy interesante, aunque más como curiosidad que porque me resultase especialmente agradable. Por último, quedé muy decepcionado tanto por la colaboración entre Amager y Three Floyds, un zumo de lúpulo al que no encontré ningún atractivo, como por Blossom Director's Cut de To Øl, en mi opinión una cerveza que se les ha ido totalmente de las manos.

El ritmo de la cata fue rápido y ameno, con Rodrigo explayándose ampliamente sin acusar en ningún momento el cansancio esperable por el viaje que había realizado, mientras que Rubén hacía de cuando en cuando algún apunte que reforzaba el dinamismo de la sesión. Hubo varios momentos muy divertidos, y pese a lo que se pueda pensar no fueron todos mientras degustabamos las últimas cervezas. Tras concluir el evento algunos volvimos a casa algo desequilibrados, mientras que otros fueron a prolongar la cata en el Manneken Beer, pero yo creo que por lo general todos satisfechos por las grandes cervezas que habíamos podido disfrutar.