viernes, 30 de noviembre de 2012

Brooklyn East India Pale Ale

MARCA: Brooklyn
MODELO: Brooklyn East India Pale Ale
ESTILO: India Pale Ale americana (6'9% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Estados Unidos

CARACTERÍSTICAS: Uno de los regalos cerveciles que me trajo Hugo en su última visita a la capital, fue esta IPA estadounidense. Había leído cosas buenas de esta cerveza, y no quedó otro remedio que comprobar por mi mismo la calidad de esta cerveza de Brooklyn.

Como su propio nombre indica, viene elaborada por la cervecera Brooklyn Brewery, cuyo nacimiento data de 1987. Su creador, Steve Hindy, aprendió a elaborar cerveza durante sus seis años de aventura  en paises de Oriente Medio, y en su retorno a Brooklyn creó la cervecera junto a su vecino Tom Potter. El diseño de las etiquetas no es muy de mi gusto, pero fue elaborado por el reconocido diseñador Milton Glaser.

Al abrir la botella ya destaca un aroma intensísimo a lúpulo fresco, conllevando gran cantidad de papeletas para resultar una cerveza excelente. En el vaso luce un color amarillo anaranjado, como ambar, con elevada carbonatación y consistencia cristalina aunque ligeramente sedosa, como turbia. La espuma es de color blanco y aguantaría un vendaval.

Centrándose en el aroma, despide notas lupuladas intensas, acompañadas de notas florales, afrutadas y ligeramente malteadas. Irremediablemente invita al trago, que se convierte en una experiencia bestial. Tiene un comienzo potente, que poco a poco va decreciendo hasta tornarse en un recuerdo en el paladar, agradable y persistente. Destacan las notas herbales de los lúpulos, amargas y riquísimas. Genera un poco de espuma en boca, que acompaña al resto de matices, afrutados, cítricos, con regusto de levadura y malta.

Me ha parecido una maravilla de cerveza, equilibrada en todos los sentidos. 

NOTA:



jueves, 29 de noviembre de 2012

Cata "Bier Chrome" en la Vinoteca III: Back in Black

Se celebró el pasado Jueves la tercera ronda del ciclo "Bier Chrome" de la Vinoteca, una vuelta a las cervezas oscuras aunque en esta ocasión tendiendo hacia vertientes más dulces, en contraposición con los sabores más secos y ásperos con los que nos deleitamos en la primera cata. Esta vez no era yo el responsable de dirigir la sesión sino que se iban a encargar de hacerlo Rubén Fernández, el responsable del Club Bier, y Luis Fernández, fundador de la Vinoteca, a pesar de lo cual me invitaron a acudir, cosa que por supuesto hice encantado.

La intención de esta ronda era, como en las otras ocasiones, resaltar las diferencias entre cervezas de color similar pero pertenecientes a distintos estilos. Contabamos sin embargo con la peculiaridad de que quien iba a realizar la cata, Luis Fernández, ha dedicado gran parte de su vida al mundo del vino y tiene una amplia experiencia en la cata de esta bebida. Esto me pareció que podía darle a las cervezas que ibamos a revisar una nueva perspectiva, lo cual siempre resulta interesante, además sumado a lo mucho que aporta a la cata un sentido del olfato y del gusto muy entrenados en esta materia.

Si la selección cervecil de las anteriores reuniones había sido muy buena, el menú al que nos ibamos a someter no se podía calificar sino como excepcional. Durante la semana previa estuve salivando al pensar en las joyas que ibamos a degustar, que finalmente discurrieron en este orden:
  • Samuel Smith's Nut Brown Ale (Brown Ale)
  • Andechs Doppelbock Dunkel (Doppelbock)
  • St. Peter's Cream Stout (Milk Stout)
  • Robinson's Old Tom Original (Strong Ale)
  • Brewdog San Diego Scotch Ale (Scotch Ale macerada con pasas empapadas en ron Ballast Point añejada en barrica de whisky)
  • Corsendonk Christmas Ale (Brune de Navidad)
  • Westvleteren 12 (Quadrupel Trapense)
Algunas de estas cervezas son viejas conocidas que sabía perfectamente que iban a funcionar sin problemas, no obstante hubo dos sorpresas entre ellas: lo maravillosa que me resultó la Doppelbock de Andechs pese a haberla bebido mil veces, y lo floja que me pareció la Christmas Ale de Corsendonk en comparación con las demás cervezas que había en la mesa. (y con la Dubbel y la Tripel de esta marca, ya sea dicho de paso) De todas formas, mi interés se centraba sobretodo en las dos cervezas que no había tenido la fortuna de probar hasta ahora. 

La nueva San Diego Scotch Ale de los escoceses Brewdog fue la primera de estas, y he de decir que no esperaba que fuese tan rematadamente buena. Es densa como un sirope y muy cremosa, cargada de frutas oscuras, chocolate y caramelo, y a la vez con notas de licor, vainilla y madera aportadas por la barrica y las pasas presentes en todo momento. No obstante, el equilibrio es impecable y estos no saturan el trago en absoluto; más bien al contrario, a medida que va calentándose la bebida ganan fuerza poco a poco, pero perfectamente integrados con los demás sabores. El único problema es el precio, que tirará para atrás a muchos (entre ellos me incluyo), pero si alguien se decide a comprarla no creo que se decepcione. 

En cuanto a la reina del baile, Westvleteren 10, había asumido que la fama que le rodea había fomentado el que estuviese sobrevalorada... no podría estar más equivocado. No me pareció una Quadrupel cualquiera, sino una cerveza compleja como pocas y rebosante de sabor, apreciándose además en este un frescor y una frutalidad que no es la típica del estilo, sin perder cuerpo y densidad. Brillante, la verdad, no como para pagar los 10 euros que se suelen pedir por ella, pero sí como para esforzarse en pasar por la abadía alguna vez.

La cata transcurrió como las anteriores, con un considerable número de personas atentos a las palabras del director, mientras iban saliendo de la trastienda una tras otra cervezas y pinchos. Fue una gozada el comprobar la capacidad de Luis de diseccionar innumerables matices tanto del aroma como del sabor, que habitualmente provocaban el asentimiento de los asistentes, aunque también se nos brindó al público la posibilidad de sacar las distintas notas de una de las cervezas. Tras dos horas y pico de cerveceo y charla, una vez que hubimos terminado tanto comida como bebida, se levantó la sesion

martes, 27 de noviembre de 2012

Corsendonk Agnus Tripel

MARCA: Corsendonk
MODELO: Corsendonk Agnus Tripel
ESTILO: Tripel (7'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Bélgica

CARACTERÍSTICAS: El otro día fue el turno de la dubbel, y esta vez llega el momento de la tripel, pareja de cervezas que me llegaron hace un tiempo de mano de Hugo. En su momento me encontré ante una ale belga excelente, lo que no siempre es garantía para encontrar todos los estilos trabajados por una cervecera a un nivel similar. Por suerte, esta vez así ha sido, cumpliendo las expectativas con creces.

Esta tripel viste un color amarillo brillante muy cristalino (sorprende la nula opacidad del caldo) y con una elevadísima carbonatación. Es genial descubrir cervezas fuera de las "prefabricadas" (véase eurolagers o cervezas iberoamericanas industriales) que tienen este aspecto tan burbujeante y fino. La espuma quizás es lo que denota mayor calidad. Esta es blanca y tiene una textura como de burbujas de jabón. Ni muy abundante ni apagada, tiene una duración respetable.

Al abrir la botella la habitación se impregna de un inconfundible aroma a ale belga. Las notas más presentes son la malta caramelizada, el toque floral y el afrutado. Es intenso, e invita a un prometedor trago. Este golpea con fuerza, notándose desde el comienzo la presencia del alcohol, pero sin llegar a empañar los demás matices. Destaca la malta, seguida de notas de melocotón y frutas maduras, que van dejando paso a matices más cítricos, algo achampañados (muy ligeramente, lo agradezco mucho) y lúpulo fresco. También se percibe la levadura y un toque floral muy presente. Su final es seco y deja un retrogusto cítrico y ardiente.

Todo un cervezón, sin lugar a dudas.

NOTA:



lunes, 26 de noviembre de 2012

FFdA #2: Anchorage Brewing Galaxy White IPA

MARCA: Anchorage
MODELO: Anchorage Galaxy White IPA
ESTILO: Witbier macerada con kumquats y pimienta negra añejada en barrica de roble (7% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Estados Unidos

CARACTERÍSTICAS: Gabe Fletcher, uno de los responsables del nacimiento en 1995 de la Midnight Sun Brewing Company en Anchorage, decidió embarcarse en un nuevo proyecto sin salir de esa misma localidad del sur de Alaska y el pasado 2011 fundó la Anchorage Brewing Company. Echando un vistazo a las elaboraciones hasta el momento queda claro que uno de los objetivos de esta cervecera es la innovación, o al menos eso sugiere la casi patológica pasión por envejecer sus cervezas en barrica de roble y la maduración con levaduras Brettanomyces, proceso que sufren indistintamente sin importar el estilo al que pertenezcan.

Esta Galaxy White IPA no es una excepción, es una single hop de lúpulo Galaxy macerada con kumquats, pimienta negra y cilantro, y añejada en tanques de vino de roble francés, con la que se pretende una fusión entre dos estilos: Witbier e India Pale Ale. Esta botella llegó a mis manos, junto con otra de la marca y varias rarezas americanas más, por cortesía de Rubén de la Vinoteca (gracias de nuevo, caballero) hace alrededor de un mes, y esta segunda edición de la genial propuesta FFdA de Birraire me ha parecido una excusa estupenda para abrirla. Tenía además en ese fondo de armario una bandeja de un rico jamón, regalo de Fernando y Cristina (mil gracias también a ellos, por supuesto), y una película de 6 horas llamada "La Meglio Gioventù" que nunca encontraba momento para verla, así que aproveché y lo junté todo en una tarde, con un resultado inmejorable.

Pese a que la he visto catalogada como "Belgian IPA", definición que todavía me revuelve las tripas, el aspecto de esta Galaxy White encaja a la perfección con una Wit, de un color dorado pajizo, turbio, brillante, cubierto por una cantidad inconmensurable de espuma blanca inmaculada que desaparece lentamente, dejando un importante remanente adherido a la pared del vaso. La reforzada carbonatación potencia el aroma, que se presenta con una medida base de malta, plátano y mínimo caramelo, que utilizan para impulsarse intensas notas de naranja dulce (¿kumquats?), uva blanca y más leve limón, teñidos de recuerdos lácteos. Por si fuese poco, delicados toques de flores, levaduras salvajes, cítricos y mínima madera terminan de pulir, consiguiendo un conjunto de una complejidad que yo personalmente no me esperaba.

Desde el primer instante en boca me recordó a yogur de limón, sugestión a la que también contribuyó su textura cremosa y su paso sedoso. No obstante, esto no era ni mucho menos todo lo que tenía la cerveza que decir, y con dedicarle un mínimo de atención se empiezan a apreciar infinidad de nuevos matices que infiltran, principalmente naranja, plátano, uva blanca y suave miel. Poco a poco van entrando las Brettanomyces, madera, recuerdos de barrica y levadura belga, dando una ajustada sequedad y acidez donde se detecta hoja de limón, hierba, clavo y pimienta. El final es de amargor claro pero medido, cargado de especias, fruta madura y lúpulo, que termina en un regusto algo seco. Una cerveza tan original como deliciosa, de equilibrio incuestionable y que consigue, a pesar de contar con semejante cantidad de ingredientes, mantenerlos a todos en perfecta armonía. Lástima que sea tan poco probable que pueda volver a probarla, pero si se presenta la oportunidad no la desperdiciaré.

¡Larga vida al FFdA!

NOTA:

viernes, 23 de noviembre de 2012

"I Concurso de Maestría Cervecera" en Pamplona

Desde que me vine a vivir a Pamplona estoy encantado con la frenética actividad cervecil que lleva La Vinoteca en general, intentando traer siempre referencias interesantes hasta el punto de que no soy capaz de seguirles el ritmo, y el Bier Club en particular, con sus meticulosamente planificadas catas y demás actividades. Sin embargo quedaba pendiente un tema también fundamental relacionado con el mundo de la cerveza y que está en claro auge en la Península, el homebrewing, sobre el que algunos asistentes a los diferentes eventos celebrados ya había manifestado interés.

Pues bien, la respuesta no se ha hecho esperar y hace apenas una semana Rubén, uno de los responsables del Club Bier, me confirmó la convocatoria del que creo que es el primer concurso de elaboración de cerveza celebrado en Navarra, que se resolverá en el mes de Marzo del 2013 tras la valoración por parte del jurado. Tengo ya en mi poder las bases del certamen, y a la espera de que sean publicadas en su totalidad por la organización dejo un resumen de los puntos que creo que son fundamentales para que quien tenga interés en participar pueda ir preparándose. No obstante, las bases completas se pueden solicitar al correo electrónico del Club Bier, que adjunto al final del post.
 

1. El concurso y las catas para determinar a los ganadores se celebrarán en la sede del Bier Club de Pamplona, en calle Esquíroz 22, trasera.

2. Las categorías del mismo son dos, Amateur y Profesional. Los participantes dentro de la categoría "Amateur" no pueden elaborar las cervezas en locales destinados a este fin con propósito comercial.

3. Los estilos en los que se competirá son English Pale Ale y Porter

4. Cada participante puede competir únicamente en una categoría, pero dentro de esta puede presentar a concurso cervezas para ambos estilos.

5. Los participantes de la categoría "Amateur" presentarán 12 botellas de 33 cl por estilo. Los participantes de la categoría "Profesional" presentarán 24 botellas de 33 cl por estilo.

6. La cuota de inscripción será de 10 euros por estilo presentado para no-socios del Club Bier. Los socios del Club Bier podrán participar de forma gratuita.

7. La entrega de las cervezas a concurso se realizará durante el mes de Febrero del 2013.

8. El jurado está compuesto por los socios del Club Bier, exceptuando aquellos que decidan participar en el concurso. 

9. Cada miembro del jurado realizará la valoración de las cervezas presentadas sobre una plantilla estandarizada. De la suma de las puntuaciones otorgadas por cada miembro del jurado se decidirán los ganadores de las diferentes categorías.

10. El fallo del jurado determinará los siguientes puestos:
  • Categoría "Amateur"
    • Estilo English Pale Ale: 1º Clasificado, 2º Clasificado, 3º Puesto
    • Estilo Porter: 1º Clasificado, 2º Clasificado, 3º Puesto
  •  Categoría "Profesional"
    • Estilo English Pale Ale: 1º Clasificado
    • Estilo Porter: 1º Clasificado

Me ha resultado curioso que estén establecidos de antemano los estilos a presentar, pero no obstante será interesante ver como se desenvuelven los participantes con unas pautas algo más marcadas. Espero que sean muchos los que se animen y la cosa este reñida. Sé que ya hay varias personas que han confirmado su participación, así que por el momento la cosa promete.

Por supuesto, ante cualquier duda se puede contactar con los organizadores.

La Vinoteca
Esquiroz
C/ Esquíroz 22 trasera, Plaza del Vino. 31007 Pamplona
Tlfno.: 948 27 80 06
Chapitela
C/ Chapitela 15 Bajo, 31001 Pamplona
Tlfno.: 948 22 10 92

jueves, 22 de noviembre de 2012

Flying Dog Imperial IPA Centennial Single Hop

MARCA: Flying Dog
MODELO: Flying Dog Imperial IPA Centennial Single Hop
ESTILO: Double IPA (10% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Estados Unidos

CARACTERÍSTICAS: Hasta que no vi una reseña en "In Birra Veritas" sobre esta cerveza de Flying Dog desconocía su existencia, y es que esta fábrica, además de sus cervezas habituales, que se consiguen bastante fácilmente en España, tiene unas cuantas rarezas que llegan con cuentagotas y que hay que cazar al vuelo porque es probable que no vuelvas a verlas. Esta pertenece al estilo mal llamado "Imperial IPA", pero con la peculiaridad de que elaboración han empleado de forma exclusiva el lúpulo americano Centennial, un género relativamente reciente que tiene bastantes similitudes con Cascade.

Es de color naranja intenso, algo turbia, recubierta por una cremosa y apetecible capa de espuma amarillenta. En nariz es una auténtica bomba de lúpulo, con un núcleo de malta ligeramente tostada, almíbar y suave caramelo que apenas es capaz de resistir el envite de mango, maracuyá, papaya, melocotón y almíbar aportado por las trepadoras, que le dan un toque achiclado. Es un perfume claramente dulce, aunque modulado por una acidez que evoca a la naranja, y en menor medida limón y mínimo pomelo, acompañada además de intensas notas aceitosas de hierba y pino. Complejo y a la vez muy sugerente, pone en la pista de que nos vamos a encontrar con una cerveza amena y fácil de beber.

Pues nada más lejos de la realidad. No cabe duda de que el dulzor de la malta, el almíbar y las frutas tropicales están presentes, y además aparecen ya en combinación con resina, pino y hierba con un resultado exquisito. No obstante, tampoco se esfuerza en esconder su agresividad y en seguida infiltra este conjunto una calidez alcohólica, reforzada por intensos puntos de especia y cítricos, entre los que prevalece el pomelo. Todo esto conduce a un final duro, de amargor marcado, en el que tampoco escasea el picante y el cítrico, que se deslizan con facilidad entre notas herbales, de albaricoque y leve miel. Desequilibrada pero dentro de los niveles deseables para una cerveza de este estilo, quema la garganta, calienta el estómago y seca la lengua, dejando en boca una agradable efervescencia que incita a repetir. Muy recomendable en mi opinión, aunque para determinados momentos... está claro que estos americanos no se andan con tonterías.

NOTA:


domingo, 18 de noviembre de 2012

Palma Cristal

MARCA: Palma
MODELO: Palma Cristal
ESTILO: Pale Lager (4'9% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Cuba

CARACTERÍSTICAS: No creo que le dedique demasiadas líneas a esta cerveza. De nuevo un regalo, esta vez de parte del carismático Pedro. Incluso él me advirtió de lo que se avecinaba al beber esta lager, sin duda una de las experiencias menos agradables para con la cerveza. De nuevo una industrial, esta vez venida desde Cuba.

Fabricada por Cervezas Bucanero S.A, que viene a ser el productor de cervezas más conocido del país, tiene su planta de producción en Holguín. Cristal, “La preferida de Cuba”, así reza el eslogan de esta pale lager industrial, ante la que se puede esperar un resultado muy "al uso" en cervezas del estilo, pero cuyo resultado, al menos para mi, es catastrófico.

Ya con abrir la botella se puede intuir un poco por donde van los tiros, que son certeros. Su aspecto es totalmente estereotípico: amarillo brillante y cristalino con elevadísima carbonatación, y espuma blanca muy poco abundante.

Su aroma es industrial, a lúpulo aromatizado, maltas industriales y maíz. En boca es muy ligera, sosa y aguada, teniendo el lúpulo y la malta (con un sabor muy prefabricado) como tónica principal. Por si acaso quedaban dudas, al cabo de un rato estos matices se tornan metálicos y más aguados.

Es totalmente un refresco light, con la diferencia de que cualquier bebida de soda se puede beber sin problemas. Terrible. Muchas gracias, señor Pedro, ansío ver con qué me sorprendes la próxima vez.

NOTA:



St. Peter's Cream Stout

MARCA: St. Peter's
MODELO: St. Peter's Cream Stout
ESTILO: Milk Stout (6'5% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Inglaterra

CARACTERÍSTICAS: Si se hace una encuesta entre los fanáticos y los no tan fanáticos de las cervezas de St. Peter's sobre cual es su favorita de entre la amplia variedad que ofrece esta marca, muchos de ellos elegirán la cerveza que voy a reseñar hoy. No es mi caso, yo personalmente prefiero su Old Style Porter o quizá, aunque en menor medida, su Ruby Red Ale, lo cual no quita que esta Milk Stout me parezca una de las mejores que he tenido la suerte de probar.

Forma parte de un estilo cuyo concepto es cuanto menos peculiar, puesto que aprovecha que la lactosa es un carbohidrato que las levaduras no pueden fermentar, para crear una Stout algo más dulce de lo habitual. Esta es una cerveza de color negro opaco, con apagados reflejos rubí, especialmente aromática. En nariz sugiere una gran cantidad de matices, situando a la misma altura tostados, malta dulce, chocolate con leche, ciruelas, pasas y frutas del bosque, mientras más de fondo quedan notas de hierba y medicinales. Es un aroma dulce, donde el ensamblaje de los diferentes componentes es sublime, creando así un conjunto uniforme.

Su textura es, como bien sugiere su nombre, cremosa, de cuerpo contundente, y pasa sedosa por boca desprendiendo recuerdos medicinales, café, torrefacto y cacao puro, lo que deja una sensación bastante áspera. No obstante esto se compensa parcialmente con notas de moras, arándanos, suave caramelo y sirope, que consiguen equilibrar la mezcla, haciéndola de trago algo más fácil. Mientras el inicio es cremoso y denso, a medida que avanzamos va surgiendo el amargor de rigor, profundo y complejo, bien provisto de torrefacto, hierba, frutos secos y un deje mineral, adornado con un agradable punto cítrico y mínima especia picante. Tras esto queda la boca totalmente, manchada de cacao y torrefacto, y la certeza de haber degustado una cerveza excepcional. La verdad es que esta fábrica tiene un nivel altísimo, pero lo 3 o 4 de sus cervezas, entre ellas esta, no tiene nombre.

NOTA:
 



domingo, 11 de noviembre de 2012

Luchs Bio Bier Kellerbier

MARCA: Luchs Bio Bier
MODELO: Luchs Bio Bier Kellerbier
ESTILO: Kellerbier biológica (5'6% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: Alemania

CARACTERÍSTICAS: Recordaba haber visto esta marca hace unos 5 años en alguno de los bares de Zaragoza, quizá en Juan Sebastian Bar, gracias al llamativo lince (si me equivoco que algún biólogo me de una paliza) de su etiqueta. No había vuelto a toparme con ella hasta hace escasas semanas, cuando Ana (a.k.a. "la Musculosa) me la trajo a casa un par de botellas que encontró por casualidad, entre ellas esta Kellerbier a la que decidí hacer reseña. Está elaborada por Michael Brauerei, una pequeña cervecera de unos 100 años de antigüedad emplazada en la diminuta localidad de Weißenstadt, a unos 30 kilómetros de otras más conocidas por temas cerveceros como son Bayreuth y Kulmbach.

Es una cerveza de color pardo rojizo, velada, cubierta por 2 dedos de espuma amarillenta que desaparece con rapidez. Reconozco que por ser "Bio" no esperaba gran cosa de ella, este tipo de cervezas suelen dejarme algo frío por ser poco intensas, y me sorprendió la densidad de su aroma, bien cargado de frutas maduras como ciruelas, pera e incluso dátiles, sobre un trasfondo de malta tostada y sirope de caramelo, dulce y sugerente. Termina de adornar su perfume un soplo de lúpulo, vestido de naranja y flores, con suaves dejes de canela y limón.

Quizá no resulta tan sabrosa en boca y se evidencia cierta falta de cuerpo, como es habitual en las cervezas "Bio" alemanas, aunque no se acerca, ni mucho menos, a niveles desastrosos. La malta se presenta firme, acompañada de frutos secos y suaves notas de dátiles y caramelo, que se acentúan levemente al final intercalándose con recuerdos de manzana golden. Como no podía ser de otra manera termina con suavidad y delicadeza, conformando un mínimo amargor especialmente frutal y floral, salpicado de discretas pinceladas de cítricos, canela y clavo. En algún momento se echa en falta algo más de contundencia, incluso tratándose de una Keller, pero la verdad es que se disfruta tanto que al final la botella se hace pequeña.

NOTA:

domingo, 4 de noviembre de 2012

DouGall's Tres Mares

MARCA: DouGall's
MODELO: DouGall's Tres Mares
ESTILO: Brown Ale (5'2% ABV)
PAÍS DE ORIGEN: España

CARACTERÍSTICAS: Las nuevas DouGall's han sido para mí uno de los descubrimientos del año, y las tres botellas que me trajeron Fernando y Cristina de Cantabria se me hicieron pocas, así que no he tenido más remedio que volver a hacerme con algunas y, ya de paso, comentar impresiones aquí. La elegida para la entrada de hoy es su Brown Ale, un estilo que en España no se ve demasiado a menudo exceptuando clásicos como Newcastle Brown Ale, Samuel Smith's Nut Brown Ale y, desde hace unos meses, Brooklyn Brown Ale.

Antes de tener la botella en mis manos esperaba que Tres Mares, al ser su elaborador de origen inglés, siguiese el camino de las Brown Ale británicas. No obstante, basta con ver en su etiqueta que emplea lúpulo Cascade y Palisade para dar por hecho que, al igual que DouGall's 942, tiende más hacia corrientes del otro lado del charco. Esta influencia es ya evidente en nariz, que muestra una base de caramelo, toffee y leves notas de manzana, que a su vez se ve eclipsada por un intenso perfume de lúpulo tropical, floral, almibarado, con un suave recuerdo de hierba y miel.

Al entrar el líquido pardo rojizo en boca se nota una importante diferencia, el lúpulo pierde relevancia en detrimento de malta y tostados, con abundantes frutos secos, suaves toques medicinales y un punto de torrefacto. En la primera mitad es la aspereza de la malta la clara protagonista, pero poco a poco se infiltran en ella notas cítricas y herbales del lúpulo americano, con delicado trasfondo de mango, naranja, albaricoque y pino, que acaban formando un final de amargor seco, algo ácido y especiado. Quizá no tan espectacular como 942, pero no obstante una gran cerveza de DouGall's, además a un precio que invita a repetir... cosa que probablemente haré.

NOTA: